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Proyeto IMS
En un proyecto único, realizado entre los meses de enero y febrero de 2019, Transdata completó el almacenamiento, el transporte, la verticalización y el izamiento de la obra de arte Echo, del artista estadounidense Richard Serra.
La obra de arte consta de dos placas de acero de aproximadamente 77 toneladas y más de 18 metros de altura cada una. Este proyecto permite que la primera obra de Richard Serra esté permanentemente disponible para el público en América Latina en Instituto Moreira Sales en São Paulo.
Se planificó el transporte a través de líneas de eje autopropulsadas al Instituto Moreira Sales Paulista para reducir el impacto social, cubriendo un tramo de más de 15 km y paralizando puntos de extremo movimiento en São Paulo. Para la realización de este proyecto épico, se utilizaron equipos de la más alta tecnología a lo que se entiende en ingeniería en Brasil.
Según el propio artista, el movimiento de las esculturas requería mucho conocimiento y sofisticación en el transporte para que el proyecto se completara con éxito. Teniendo en cuenta el peso de la obra de arte, Serra afirma que sin un estudio preciso, no sería posible conducir esculturas de acero a lo largo de las carreteras de São Paulo. Además, este memorable proyecto contó con un gran equipo especializado de Transdata para garantizar el transporte y la verticalización de la escultura, que a pesar de ser muy grande, implicó mucha innovación debido a su complejidad y delicadeza.
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La obra de arte consta de dos placas de acero de aproximadamente 77 toneladas y más de 18 metros de altura cada una. Este proyecto permite que la primera obra de Richard Serra esté permanentemente disponible para el público en América Latina en Instituto Moreira Sales en São Paulo.
Se planificó el transporte a través de líneas de eje autopropulsadas al Instituto Moreira Sales Paulista para reducir el impacto social, cubriendo un tramo de más de 15 km y paralizando puntos de extremo movimiento en São Paulo. Para la realización de este proyecto épico, se utilizaron equipos de la más alta tecnología a lo que se entiende en ingeniería en Brasil.
Según el propio artista, el movimiento de las esculturas requería mucho conocimiento y sofisticación en el transporte para que el proyecto se completara con éxito. Teniendo en cuenta el peso de la obra de arte, Serra afirma que sin un estudio preciso, no sería posible conducir esculturas de acero a lo largo de las carreteras de São Paulo. Además, este memorable proyecto contó con un gran equipo especializado de Transdata para garantizar el transporte y la verticalización de la escultura, que a pesar de ser muy grande, implicó mucha innovación debido a su complejidad y delicadeza.